Me inclino a los pies de los maestros que enseñan que,
como una luz cubierta, el tesoro de un mendigo,
o el príncipe gestado en las entrañas de una pordiosera,
la esencia del Buda —la luminosidad, la Forma de la Verdad—
existe bajo la cubierta de los conjuntos convencionales e incidentales.
—Dolpopa Sherab Gyaltsen
Excelente